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Por Redacción , 8 de septiembre de 2020El cromo y su función clave en el metabolismo del ganado lechero
El cromo es recomendado en las formulaciones de los nutricionistas; especialmente en períodos en los que las vacas son sometidas a condiciones de estrés.
Los avances en las investigaciones sobre los factores de productividad en el ganado lechero han llevado a la industria a re-examinar algunos nutrientes, que previamente se consideraban que se encontraban en cantidades adecuadas en la dieta y que no debían suplementarse.
En la década de 1950, el cromo (Cr) era considerado como un micro mineral esencial para los animales, sin embargo, los primeros ensayos en rumiantes se publicaron recién a principios de los años 90 por Chang y Mowat. A partir de entonces se han realizado diversos estudios con resultados favorables, por lo que en la actualidad el cromo es recomendado en las formulaciones de los nutricionistas de todo el mundo; especialmente en periodos en los que las vacas son sometidas a condiciones de estrés.
Importancia del cromo en el ganado lechero
El cromo actúa potenciando la acción de la insulina –una hormona fundamental para el metabolismo– a través de un aumento en la comunicación entre la insulina y sus receptores ubicados en la membrana celular. Por ello, el cromo es considerado un componente integral del complejo molecular, conocido como “factor de tolerancia a la glucosa” (FTG); actuando como un cofactor de la insulina en su función de transportar la glucosa circulante hacia los tejidos periféricos. Por esto, el cromo tiene una función fundamental para el metabolismo de los carbohidratos, las proteínas y los lípidos. Y cuando se encuentra en cantidades suficientes en la dieta, puede ser un aporte para la prevención de alteraciones metabólicas (como cetosis o fiebre de leche). Aunque la composición química del FTG no ha sido completamente descrita, se considera que está formado por cromo trivalente como componente activo, al que se le ligan 2 ácidos nicotínicos y los aminoácidos de glutationa, ácido glutámico, glicina y cisteína.
¿Cuándo suplementar con cromo?
Existen circunstancias fisiológicas y dietéticas donde el cromo debe ser suplementado debido a deficiencias en la dieta o a un aumento en su utilización como parte del complejoFTG en dietas altas en carbohidratos. En este último caso, se debe optimizar la utilización de grandes cantidades de glucosa circulante y también durante periodos de estrés, debido a la respuesta hormonal que igualmente genera aumentos en la glicemia.
Circunstancias en las que el cromo debe ser suplementado.
El cromo reduce la respuesta al estrés
Los sistemas productivos actuales exponen a las vacas a distintos factores estresantes a lo largo del ciclo productivo. Esto se debe a causas ambientales, nutricionales, patológicas o metabólicas. Durante situaciones de estrés se aumenta el metabolismo de la glucosa y la insulina, como respuesta a un elevado nivel de cortisol en la sangre. El cortisol actúa de una forma antagónica a la insulina; aumentando la gluconeogénesis en el hígado a través de un mayor catabolismo de las proteínas y del tejido adiposo, y de un aumento de las enzimas hepáticas necesarias para la conversión de los aminoácidos a glucosa. Además, previene la entrada de la glucosa al músculo y al tejido adiposo, dejándola disponible para otros órganos que tienen una mayor demanda como el hígado y el cerebro. Esto último genera un aumento de los niveles sanguíneos de glucosa e insulina, y una mayor excreción de cromo a través de la orina; por lo que existe una correlación positiva entre el nivel sanguíneo de cortisol y la excreción urinaria de cromo. Las condiciones de estrés, por ende, pueden resultar en una deficiencia de cromo, especialmente cuando el consumo del mineral es bajo.
La suplementación con cromo ha demostrado provocar reducciones importantes de los niveles sanguíneos de cortisol en los animales sometidos a condiciones estresantes. Por ello, se considera al cromo como un nutriente anti-estrés clave en los sistemas productivos.
Función del cromo en el periparto
El final de la gestación y el inicio de la lactancia representan los periodos más críticos en el ciclo productivo de las vacas. Durante este periodo ocurren cambios fisiológicos, metabólicos y nutricionales muy importantes; que determinarán el éxito productivo de la siguiente lactancia. El bajo consumo de materia seca preparto y la alta demanda energética al inicio de la lactancia, dificultan proveer la cantidad óptima de energía que la vaca requiere; lo que puede originar distintos grados de cetosis, una mayor producción de ácidos grasos no esterificados (NEFA, por sus siglas en inglés), pérdida de la condición corporal e hígado graso. Esto hará que la vaca tenga que generar un gasto energético adicional, con la finalidad de contrarrestar estos efectos negativos, mermando así la cantidad de energía disponible para la síntesis de leche; lo que afecta la salud en general sobre todo durante el periparto.
Asimismo, diversos estudios señalan una disminución en la acción de la insulina durante el pre y postparto. Por lo que la suplementación con cromo puede optimizar su acción, lo que se traduce en mejores índices productivos al inicio de la lactancia.
La importancia de la fuente de cromo
Tanto la cantidad como la estructura química del cromo son importantes a la hora de planificar una suplementación. En el mercado existen numerosos complejos orgánicos e inorgánicos de cromo, sin embargo, estos últimos son absorbidos de manera muy lenta y a tasas que oscilan entre el 0.4 y 3%. Por el contrario, con fuentes orgánicas la absorción es más rápida y la biodisponibilidad es mayor. Dentro de las fuentes de cromo orgánico, aquellas ligadas a la levadura (cromolevadura) son más efectivas debido a su alta similitud a la forma en que este se encuentra en la naturaleza.
Ventajas de las fuentes orgánicas de cromo sobre las inorgánicas
- Son de más rápida absorción.
- Son bioactivas.
- No requieren de precursores en la dieta (como aminoácidos o niacina para ser bioactivas).
- Tienen una menor interferencia con el hierro, el zinc y otros nutrientes.
- No contaminan el medio ambiente.
Conclusiones
Se ha demostrado que el uso del cromo en el ganado lechero tiene un impacto positivo en el periparto y en circunstancias en las que el requerimiento de cromo es superior al que se obtiene por la dieta, por lo que este efecto positivo puede manifestarse durante toda la lactancia. Un aumento en el consumo de materia seca, la reducción de los NEFA y de la cetosis, y una mejor acción de la insulina; se traduce en una mayor eficiencia para la producción de leche y en una mejor función reproductiva.
Autora: M.V. Gabriela Heim Hales
Gerente de Ventas de Alltech Chile