Leche: seis mitos antiguos que a menudo generan confusión

La leche es fundamental de la alimentación humana durante siglos. Sin embargo, a su alrededor persisten mitos que a menudo generan confusión.

La leche, ese líquido blanco y nutritivo, ha sido parte fundamental de la alimentación humana durante siglos. Sin embargo, a su alrededor persisten mitos que a menudo generan confusión. En este breve artículos, explicaremos algunos de estos mitos y desentrañaremos la verdad detrás de ellos.

La leche pierde sus propiedades durante el proceso, es uno de los mitos más antiguos que existe. Los cierto es que es falso. En realidad, el proceso de pasteurización y homogeneización que la industria láctea utiliza no afecta negativamente las propiedades de la leche.

Estos procedimientos eliminan cualquier contaminación microbiológica y garantizan su seguridad y conservación a largo plazo. Otro mito que podrías haber escuchado alguna vez es: “La lechesolo es necesaria en la infancia”: El cual es netamente falso.

Si bien es cierto que la leche es fundamental para los bebés y niños debido a su alto contenido de calcio, también es beneficiosa para adultos mayores. El calcio fortalece los huesos, regula el ritmo cardíaco, las funciones musculares y la presión arterial.

“La leche causa tumores”: también es falso. No existe evidencia científica que relacione el consumo adecuado de leche con efectos perniciosos para la salud. Muchas afirmaciones negativas suelen ser producto de campañas interesadas o información errónea.

“La leche en polvo es menos nutritiva”: es igual de falso que el anterior mito. La leche en polvo conserva sus nutrientes esenciales y es una alternativa práctica para su almacenamiento y transporte, es por eso que su elaboración y venta ha crecido bastante en todo este tiempo.

Últimos dos mitos

“La leche es aguada”: es falso.  La leche fresca no debería ser aguada. Si lo es, podría ser un problema de calidad o almacenamiento incorrecto. “La leche es mala para la digestión”: y sí, también es falso. La mayoría de las personas toleran bien la leche.

Sin embargo, algunas pueden ser intolerantes a la lactosa. En esos casos, existen alternativas sin lactosa. En resumen, la leche es un alimento valioso que proporciona nutrientes esenciales. Desmitifiquemos los falsos rumores y disfrutemos de este lácteo con conocimiento y moderación.

Fuente: El Espectacular

Autor: Marcelo Chocobar