Día Internacional de las Mujeres Rurales: Desafíos y logros de la realidad chilena

Angie Faúndez, gerente de la Unidad de Negocio de Ganadería de Zoetis Chile, explora los desafíos, logros y el impacto de su labor, destacando el esfuerzo y la resiliencia que demuestran día a día.

Cada 15 de octubre, se celebra el Día Internacional de las Mujeres Rurales, una fecha que invita a reconocer el rol fundamental que estas desempeñan en el desarrollo económico, social y cultural de las comunidades rurales. Las mujeres rurales son el motor detrás de la producción agrícola, la seguridad alimentaria y la preservación de las tradiciones locales, contribuyendo a la sostenibilidad del medio rural.

En esta entrevista con Angie Faúndez, gerente de la Unidad de Negocio de Ganadería de Zoetis Chile, exploramos sus desafíos, logros y el impacto de su labor, destacando el esfuerzo y la resiliencia que demuestran día a día.

Angie, ¿Cómo ha visto la contribución de las mujeres rurales en la ganadería en los últimos años?

La contribución de las mujeres en el sector rural ha sido significativa y ha crecido notablemente. Son una fuerza laboral clave en la gestión diaria de los animales y también lideran iniciativas innovadoras y sostenibles. Han jugado un papel crucial en la implementación de prácticas agroecológicas que promueven la sostenibilidad. Sin embargo, enfrentan desafíos, como el acceso limitado a recursos financieros.

Organizaciones como la FAO y ONU Mujeres han subrayado la importancia de las mujeres rurales en la transformación de los sistemas agroalimentarios, mientras que en Chile, el Ministerio de Agricultura y el INDAP han promovido recursos para proyectos liderados por mujeres.

¿Cómo valora la creciente participación de mujeres en la vida agrícola y ganadera, particularmente en Osorno?

Este aumento en la participación femenina es una señal clara de que la inclusión de las mujeres es vital para el desarrollo sostenible del sector. Las mujeres aportan nuevas perspectivas y promueven prácticas más responsables. Su inclusión también empodera económicamente a las mujeres, mejorando su acceso a recursos y oportunidades laborales, lo que beneficia a toda la economía rural.

En Osorno, hemos visto un notable aumento de mujeres liderando actividades clave en lecherías, como la crianza de terneros. Un buen ejemplo son los Grupos de Transferencia Tecnológica (GTT), formados exclusivamente por mujeres, que refuerzan su presencia y generan redes de apoyo.

¿Cómo interactúan con las mujeres rurales?

Estamos comprometidos con el desarrollo de las mujeres en el mundo agrícola y rural a través de diversas iniciativas que fomentan su crecimiento y empoderamiento. Contribuimos mediante seminarios, programas de capacitación y espacios que permiten a las mujeres rurales desarrollar tanto sus habilidades personales como profesionales. Estos esfuerzos buscan fortalecer su papel en el sector, apoyándolas para que alcancen su máximo potencial.

¿Cuáles son los desafíos futuros para las mujeres rurales?

A mi juicio, los principales desafíos que enfrentan las mujeres rurales hoy en día incluyen el acceso limitado a recursos que les permitan invertir en actividades productivas, así como la persistente desigualdad de género. 

He podido ver de cerca estos desafíos. Las mujeres rurales suelen asumir tareas domésticas no remuneradas, lo que limita sus oportunidades. Es crucial que tengan igual acceso a tierras, créditos y capacitación, y que se apoye el emprendimiento femenino para avanzar hacia una mayor equidad en el sector ganadero.