Investigación & Desarrollo
Por Redacción , 30 de enero de 2025 | 07:56Especialista de INIA Remehue comparte claves para mejorar la producción de praderas y cultivos a través de un riego eficiente
Homero Barría, investigador y extensionista, explicó que el riego en praderas puede aumentar la producción de forraje hasta en 5 toneladas de materia seca por hectárea, mientras que en cultivos como la papa es posible mejorar notablemente el rendimiento y la calidad.
El especialista en riego de INIA Remehue, Homero Barría, destacó la importancia de implementar sistemas de riego adecuados para mejorar la productividad ganadera y agrícola en la zona sur de Chile.
A lo largo de las últimas décadas, INIA ha trabajado intensamente en investigar y optimizar tecnologías de riego, enfocándose en la gestión eficiente del agua, el aumento de rendimiento y productividad y la reducción del consumo energético en el sector.
El investigador sostuvo que "la experiencia de INIA indica que los sistemas de riego se deben adaptar a la realidad de cada agricultor". En particular, para la producción de praderas destinadas a la producción de leche o carne en el sur de Chile, los sistemas de pivote central y tazas son los más utilizados.
Los estudios realizados por INIA Remehue han demostrado que la implementación de riego puede aumentar considerablemente la producción de forraje. “Nuestros resultados muestran que la producción aumenta hasta en 5 toneladas de materia seca por hectárea”, afirmó el experto de INIA.
Además, añadió que “esta práctica permite extender el periodo vegetativo de la pradera durante la primavera y el verano, así como mejorar la calidad nutricional de los forrajes”.
El profesional explicó que gracias a las investigaciones de INIA, en praderas y con sistemas de tazas, se ha disminuido el tiempo de riego de 8 a 6 horas por postura, lo que reduce el uso de agua y energía.
Cultivos
En el caso de cultivos como la papa, indicó que el carrete es el sistema de riego más utilizado y su uso está ampliamente extendido en la zona.
En este cultivo, el riego no solo mejora los rendimientos sino también la calidad del tubérculo y un buen uso de esta tecnología contribuye también a la rentabilidad del negocio por el significativo ahorro que se puede generar en el consumo de agua y los costos de operación.
En este aspecto, señaló que las investigaciones de INIA han permitido entregar recomendaciones técnicas que maximizan la rentabilidad en la producción de praderas y cultivos mediante el uso eficiente de los recursos. Por ejemplo, se ha logrado reducir considerablemente las tasas de riego, manteniendo rendimientos óptimos.
“Los resultados, en el caso del carrete de riego en papas, nos han permitido bajar las tasas de riego, por ejemplo, desde 40 milímetros a 20 milímetros", indicó.
Finalmente, hizo un llamado a los productores ganaderos y agricultores a incorporar esta tecnología aprovechando los beneficios que entrega el Estado. "Es importante considerar también que existen instituciones que fomentan el riego, está la Comisión Nacional de Riego, el INDAP y la CONADI que tienen recursos para cofinanciar proyectos", subrayó.
El investigador de INIA sostuvo “un manejo adecuado del riego puede impactar positivamente en la productividad y sostenibilidad de la producción de leche y de cultivos, por lo que INIA Remehue seguirá entregando recomendaciones para enfrentar los desafíos actuales del sector y garantizar un futuro más sustentable y eficiente en la ganadería y agricultura chilena”.